martes, 24 de marzo de 2015

Metodología para autoescucharse

En los tiempos en que vivimos parece que lo más relevante son los resultados al costo que sea, el pragmatismo del modelo de productividad parece que no nos da descanso, al mismo tiempo son pocos los modelos formativos o laborales que nos ayudan a desarrollar una metodología para la obtención de resultados.

Como punto de unicio es importante destacar la obtención de metas no son absolutas, más bien dependen de la paulatina  obtención de niveles que poco a poco nos van generando la confianza, generar una cultura de metas es tanto como una cultura ganadora. Ser parte de un círculo virtuoso.

Como puedes apreciar en la ilustración, creada por Karla Arias y que se puede revisar en http://ticsyformacion.com/2014/09/17/saboteadores-internos-infografia-infographic-psychology/, los saboteadores internos es una manera de referirnos a las creencias limitadoras, ideas que pueden ser externas o propias que parecería que nos inducen al fracaso.

Infinidad de eventos en nuestra vida tienen posibilidades de éxito o de fracaso, pero la tendencia es que enfoquemos con más atención lo desfortunado. Puede ser una forma de autojustificarnos o prevenir nuestros mecanismos de disculpa.

De ahí el valor de la información que enlazo y de la que deseo comentar algunas preciones, es importante desarrollar una metodología para los pasos 1, 2 y 3, pues para poder escuchar lo que decimos no basta con poner atención, el cerebro trabaja más con lo que ve que lo que escucha.

¿Cómo lograr esto?, por medio de un diario emocional. Simple, solo es disciplinarte con el punto 7. Tomar una libreta, pequeña, digamos de formato francesa, y anotar, reflexionar, describir, trabajar con la emoción más intensa cada uno de nuestros días.

No es un recuento de todas las cosas que se hacen en el día, es solo centrarse en lo más intenso como felicidad, enojo, frstración del día, es solo describir las cosas (como lo marca el punto 4 y 5).

La revisión de ese texto que se hace de manera diaria permite que la persona pueda ver, con frialdad, con otro lente, con más calma, las emociones vividas y sobre ello poder sacar conclusiones más precisas, ver lo que ha hecho y poder valorarlo desde otra perspectiva: la del observador. Al cumplir con ello es posible avanzar con seguridad hacia lo que es la punto 8.

Podemos estar conscientes de que la escucha de uno mismo   es parte fundamental de la ontención de metas, pero se tiene que hacer con método, porque así como podemos estara atentos a nuestro diálogo interno, el ego también es protagonista y conviene estar atentos a sus expresiones limitadoras y de conflicto.

Por otra parte, es perfectamente posible que se escriba por tiempo largo y aún no logremos los cambios y resultados que buscamos, es posible que lleguemos al techo de competencias, es ahí donde el coach puede, por medio de diálogos y diversas herramientas potenciar las habilidades de escucha y cambio en la persona. Inicia con el primer paso, escribe tu diario emocional y tu mismo sabrás cuál es el momento de buscar ayuda que te lleve al siguiente nivel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario